"... en el día en
que María
cumplió catorce años todos los varones descendientes de la
casa de David
se reunieron en el Templo. El Señor
Dios habló al corazón del Sumo
Sacerdote inspirándole a que pusiera una vara seca en las manos
de cada uno de los hombres presentes y les pidiera que rezaran con
fe viva solicitando al Altísimo
que lo eligiera como Esposo de María.
Ellos lo hicieron con agrado porque el suave aroma de la virtud y nobleza
de la doncella, como la fama de su belleza y modestia era bien conocida
por todos.
Entre ellos sólo el humilde
y recto José
pensaba no ser digno de tan grande distinción; recordando además
el voto de castidad que había realizado y reafirmando su perpetuo
cumplimento se entregaba a la voluntad de Dios
dejando todo a Su disposición al mismo tiempo que sentía
una veneración y estima por la noble doncella María
mayor que la de todos los presentes.
Mientras estaban sumidos en profunda
oración la vara seca que José
sostenía entre sus manos floreció y al mismo tiempo una paloma
del más puro color blanco y resplandeciente con admirable luz descendió
sobre la cabeza del Santo mientras el Señor
Dios hablaba en el interior de su corazón:
"José,
mi siervo, María
será tu Esposa acéptala con respetuosa reverencia porque
Ella halló gracia a mis ojos siendo justa y de la mayor pureza de
alma y cuerpo. Tú debes hacer todo lo que Ella te pida."
Ante esta divina manifestación
los sacerdotes declararon a San José
como el Esposo elegido por Dios
mismo para la doncella María..."
"... Y
la vara del hombre que Dios
escogiera florecería. Una vara es un trozo de madera, cortada en
ambos extremos. Por un extremo está deshojada y por el otro, sin
raíces. En otro tiempo estaba viva, ahora no corre savia por ella.
No puede florecer ni dar fruto. ¿Quién hace pués florecer
la vara?".
Es
Dios
quien lo hace. Es Él quien pone el poder de la vida en una vara
muerta. No proviene de lo natural o de la propia capacidad, José
pudo haber piaron a San José
como el Esposo elegido por Dios
mismo para la doncella ntado la vara, podría haberla tallado, pero no la podía
hacer florecer. Nadie oyó jamás de una vara seca que floreciese...
ni de una mujer anciana que concibiese. Sara
dio a luz a Isaac;
pero esto fue la obra de Dios.
Por eso Sara
acá representa la *resurrección*. La resurrección
es lo que yo no puedo hacer, pero que Dios
sí puede.
El
nombre de "Isaac"
significa *risa*. Sara
se rió, porque sabía que era demasiado anciana para concebir,
lo consideraba imposible.- Al servir al Señor
nosostros deberíamos reirnos también y decir: "No puedo;
sé con toda seguridad que soy incapaz, pero ésta obra
que se está realizando es mérito tuyo, Señor,
no
mío".
Fue
Dios
pues, quien eligió a José
para que lo represente en la tierra. El florecimiento de la vara mantiene
humilde a los hombres, saben que es obra de Dios.
Y José
era humilde..., se sentía pequeño, no hacía milagros
y mantuvo su vida tan escondida que casi nada sabemos de ella.
Que
él, nos ayude a huir de las alabanzas y de la gloria humana. Que
nos ayude a encontrar gusto en vivir escondidos y en relativizar nuestros
intereses personales. AMÉN